Ley de Desarrollo Rural
Entre las muchas noticias que se suceden en los últimos días, ha habido una de especial trascendencia social, pero de nulo eco mediático. Ayer lunes 3 de diciembre, el Congreso de los Diputados aprobó la Ley de Desarrollo Rural, una apuesta que incide en la necesidad de poner fin a la despoblación del medio rural, y que se erige, a mi juicio, como una de las más necesarias políticas estatales a desarrollar. No podemos olvidar que en el conjunto del Estado supone el 90% del territorio, en el que se encuentran un 80% de los municipios, así como un 35 % de la población, lo que por otro lado equivale a más de 14 millones de personas en toda España.
Entiendo que no podemos omitir la importancia que tiene nuestro medio rural, lo que supone en el conjunto de la sociedad, porque pese a que se nos margina, por no ser el mejor "granero electoral", en cambio nos erigimos en los salvaguardas de tradiciones, de patrimonio, en los abastecedores de los mercados, y en definitiva en el sostén del medio urbano. Hemos padecido la lacra de la despoblación, de la desindustrialización y hemos contribuído al desarrollo de las ciudades, a costa de ver perecer a muchos de nuestros pueblos. El campo ha padecido el cierre de escuelas, el hundimiento del patrimonio, la pérdida de buena parte de nuestra memoria, y es por ello, por lo que es de justicia el repararnos por esa deuda histórica.
Con los apenas 500 millones de € de los que se dota la ley, no se podrán hacer maravillas, ese dinero apenas bastaría para intervenir con urgencia en Teruel, la provincia más afectada por la despoblación, pero cuando menos se ha iniciado el camino. La lástima como siempre, es que entre tanta política como acostumbramos a tener que digerir, entre los encontronazos bipartidistas y las políticas antiterroristas, no existe hueco para este acontecimiento político de tanta importancia. Confiemos en que la blogosfera se haga eco de esta ley, cuando menos las gentes del medio rural también tenemos derecho a que se legisle en nuestro beneficio, somos los guardianes de la biodiversidad de nuestro mundo, y conviene que se nos haga un poco más de caso, aunque solo sea porque muchos de los que ayer votaron en el congreso, tienen sus orígenes en algún recóndito pueblecico, y eso se tiene que notar.
P.D. La Foto es del puente de Miravete de la Sierra, en la Comarca del Maestrazgo de Teruel
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