DOS NO HABLAN SI UNO NO QUIERE
Como han cambiado las cosas en poco más de un mes. Recuerdo que el 16 de junio el nuevo alcalde de Alcorisa, exultante como estaba, lanzaba mensajes de concordia, apelaba al diálogo, al consenso, hablaba sin cesar de hacer un pacto por Alcorisa, un acuerdo entre todos con una serie de medidas comunes por el bien de nuestro pueblo. Claro que eso solo es un gesto atribuible a los grandes políticos a los estadistas, porque tal y como se ha demostrado en poco más de un mes, ni José Antonio Burriel es un gran político, ni sabe mantener esa palabra.
Ya lo dije hace unos días al respecto del pleno que constituía los órganos de gobierno, hay que saber respetar los acuerdos, hay que saber escuchar, y sobre todo ante el respeto, el tono comedido, y la voluntad de diálogo esgrimida por la oposición, hay que saber estar y actuar, hay que saber hacerlo, y José Antonio Burriel no sabe. Se le llenó la boca de Junta de Portavoces para comentar los grandes asuntos municipales, y nos tenemos que enterar el sábado a las 10 de la mañana de que ha cerrado al tráfico la Plaza de los Arcos, y que además ha cambiado el sentido a la Calle Mayor. Lo lógico es que ante la trascendencia de esa decisión, hablase con la oposición, nos hubiese consultado, o cuando menos advertido, pero no imponernos esto. No está bien hacer así las cosas Burriel, no son las formas adecuadas, y esto es algo preocupante, que en poco más de 30 días se obre de este modo.
Desde CHA mantenemos la mano tendida al diálogo, desde luego, a la búsqueda de consensos, y en esto como en todo "DOS NO HABLAN SI UNO NO QUIERE", y José Antonio Burriel parece no querer hablar, porque los demás le estamos esperando, al menos ese es mi caso, y creo haber demostrado que puedo hablar con todo el mundo. No cuesta nada llamarnos, no cuesta nada descolgar el teléfono, pero esos son los modos imperantes en nuestro nuevo Ayuntamiento, esa es la "atención a las personas". Siga así, Sr. Burriel, que nos vamos a divertir mucho con tantas ocurrencias, ya sabemos que su imaginación no tiene límites, que aún nos reímos al recordar la moción presentada el año pasado en estas fechas para invitar al Papa a que viniese a ver la Pasión de Alcorisa, que cachondo.
Seguiremos opinando, de momento la cosa no pinta "muy allá", es más solo basta saber como se viene trabajando en la Comisión de Fiestas, lo que ha sido hasta la fecha un ejemplo de diálogo, de transparencia, de compromiso, y que ahora se empecinan en querer controlar. Pues nada, nada, los agraviados acudiremos al concejal delegado del área, bien sea de Atención a las Personas, de Mejora de la Calidad de Vida, o el que sea, porque de momento yo no me aclaro.
Lo dicho, que así no se hacen las cosas Burriel, repito que DOS NO HABLAN SI UNO NO QUIERE, y aquí el único que parece no querer hablar es el alcalde.
2 comentarios
Ángel -
luis -